domingo, 21 de septiembre de 2008

EL MILAGRO JAPONES Y EL DESAFIO PERUANO

EL MILAGRO JAPONÉS Y EL DESAFÍO PERUANO

Daniel Quineche Meza

En 1945 el ingreso per cápita de Japón era de 20 dólares; y para el año de 1956, ya habían recuperado el nivel de anteguerra de 300 dólares. En 1970 es ya de 1,800 y en 1984 llega a alcanzar niveles similares al de los E. U. A. 11,210. En 1990 es de 21,000 y en el 2005 alcanza los 31,267 anuales. ¿Cómo fue posible que en solo 45 años rebasen al país más industrializado y de mayor riqueza en el mundo?
En el Japón, en 1938 solamente el 5 por ciento de su población llegaba a niveles profesionales y el 50 por ciento terminaba los estudios correspondientes a secundaria. Estos no son, por supuesto, datos que por sí solos justifiquen el milagro japonés. Lo sorprendente es que en los últimos 40 años, el 60 por ciento de su población alcanza estudios de nivel profesional y el 90 por ciento termina el bachillerato, cifras que comparadas con las de E. U. A. donde solamente el 74 por ciento logra terminar la secundaria entonces se puede hablar de que los japonés tienen una cultura progresista y en constante desarrollo.
Si E. U. A. no modifica sus sistemas educativos y continúa desarrollándose como en la actualidad lo viene haciendo, alcanzará los niveles de Japón en 70 años. Alemania lo lograría dentro de 100 años y Francia en 200 años.
Perú con un nivel educacional de 7.0 años de primaria está a una distancia inconmensurable, a menos que modifique radicalmente sus objetivos y la manera de alcanzarlos.
El desafío consiste en elevar el nivel educativo de la población. Es decir, impulsar el desarrollo educativo de la población incrementando la matrícula (crecimiento) y promoviendo la movilidad ascendente de los matriculados en el sistema educativo (cualificación).
El crecimiento de la matrícula implica:
- Cambio de la cultura de crianza de los padres.
- Compromiso de los padres para que matriculen a sus hijos desde temprana edad y apoyen su educabilidad.
- Retención de los matriculados en los procesos educativos.
- Recuperación de las poblaciones que abandonaron el sistema educativo en algún momento.
- Incremento de la confianza en el servicio educativo que se brinda.
El incremento de la cualificación implica:
- Claras trayectorias formativas
- Desarrollo curricular adecuado, coherente y pertinente
- Magisterio comprometido y formado adecuadamente
- Gestión educativa eficiente y eficaz.
- Pasarelas adecuadas entre el sistema educativo y los otros sistemas de la sociedad, particularmente el sistema productivo.
- Incremento constante de la inversión educativa.
- Evaluación periódica de metas.
Estas son algunas de las decisiones que tendrán que tomarse en el breve plazo tanto por el gobierno central como por los gobiernos regionales y locales.